Desde el pasado sábado y hasta el martes día 29 de septiembre la Hermandad exhibe en el Salón del Hospital (en Carrera de la Virgen con esquina a Puente de la Virgen) una selección de pinturas del joven artista granadino Jorge Marín Montoya. La muestra se presenta bajo el título “Divinos Protectores: Covid desde lo Sagrado” y comprende una cuidada antología de las acuarelas realizadas por este autor durante el confinamiento, como elocuente testimonio de los tiempos vividos y su entronque con el arte sacro.
Porque ciertamente la esencia de estas obras en papel, salvo la representación al óleo de la Señora Santa Ana, es conjugar las devociones tradicionales, invocadas en muchas ocasiones en momentos de dificultad (epidemias incluidas), con las escenas del combate contra la pandemia que han quedado ya marcadas en nuestras retinas y en nuestras vidas. De ahí la constante presencia de personal sanitario, de batas y medicamentos, del propio coronavirus, de camas de hospital y sueros, de mascarillas o pantallas faciales.
El resultado es una obra única y un testimonio inigualable de la experiencia vivida y de nuestros propios estados de ánimo, a los que Jorge Marín ha brindado su trazo ágil y un colorido pletórico, pero sobre todo un enfoque muy imaginativo aun respetando estampas clásicas de nuestro arte religioso, que hace a las figuras fácilmente reconocibles.
Lugar destacado ocupa la Virgen María. Junto a la Virgen Niña con santa Ana, doblegando la curva de contagios, destaca de forma especial la granadinísima representación de la Inmaculada, la primera que ejecutó de esta brillante serie, una Virgen del Rosario con apariencia de enfermera y la representación de la Virgen de las Angustias, quizás la que más proyección ha tenido de todas estas obras, inspirada en la pintura del camarín que recuerda el salvamento de la Sagrada Imagen durante el incendio de su camarín.
La misma Virgen de las Angustias completa un ciclo pasional altamente interesante, que cuenta con representaciones de Jesús Nazareno, de sabor giennense, de un Niño Jesús con la cruz a cuestas, inspirado en una obra escultórica de La Roldana, de una elegante Mujer Verónica, tomada del genio de Salzillo, o del tremendo rostro del Cristo de San Agustín de Granada, en este año en que su Hermandad conmemora el quinto centenario de la realización del impresionante Crucifijo. Especialmente impactantes son las láminas que representan la Soledad de María y Descendimiento del Señor, también inspirada en el arte de Jacopo Torni y ambientada en una UCI, y la espectacular Resurrección de Jesús entre dos sanitarios.
El resto de las acuarelas nos presentan a santos protectores, como es el caso del arcángel San Miguel, combatiendo el virus como capitán de las legiones angélicas, los Santos Cosme y Damián, patrones de la Medicina, y el patrón de los enfermeros, el arcángel San Rafael. Se incluyen otras dos representaciones de reyes santos, cuya protección se invocó asiduamente en el pasado, Fernando III el Santo y San Luis Rey de Francia.
La muestra se presenta en ese singular salón del siglo XVII que fue la sede del Hospital de las Angustias, lo que acentúa aún más el simbolismo de esta exposición que, lógicamente en los tiempos que vivimos, se concibe como un homenaje al personal sanitario cuyas acciones hemos de calificar en muchos casos como heroicas. Y todo ello bajo la protección de la Virgen María, por un lado, por la cercanía del “manto del pueblo o de la ciudad”, el más característico de nuestra Patrona y, por otro, bajo la impresionante talla de la triunfal Virgen María que talló Pedro Duque Cornejo hacia 1714.
Es una muestra que no te puedes perder en estos días de finales de septiembre que en Granada discurren en torno a la Virgen de las Angustias. Visítala por la tardes en horario de 18 a 20 horas, y si te acomoda un horario distinto, consúltalo con la Hermandad.
Muchas gracias a quienes han hecho posible esta entrañable exposición de nuestros “Divinos Protectores”.
