Como su nombre indica, es la Sala donde se reúne en cabildo la Hermandad. Hoy ha quedado pequeña para este menester, pero conserva un sabor antiguo y funcional relacionado con ese cometido, como es el estrado en alto para la mesa, presidida por un Crucifijo, y los bancos tapizados en rojo para que tomen asiento los hermanos (la Real Hermandad data de 1545). Además se comunica directamente con el altar mayor, lo que permite que se pueda seguir la misa desde este privilegiado lugar. En esta sala se exponen dos mantos de la Virgen de las Angustias. Mantiene una impronta dieciochesca, con abundancia de pinturas, entre las que sobresalen las relativas a la monarquía española, tan ligada a la devoción granadina a la Virgen de las Angustias.
En la vida de la Iglesia, en el pasado y en el presente, los laicos encuentran un lugar específico en las asociaciones confraternales. La hermandad es un organismo colaborador en la misión de la Iglesia, de la que participa, consagrándose de forma específica a tareas de culto y devoción (en concreto el Santísimo Sacramento y Ntra. Sra. de las Angustias) y a la práctica de la caridad.
Mantos.
- Manto de Isabel II: bordado en Madrid en 1855, en terciopelo negro bordado en oro, con greca más recargada y salpicado de flores. Regalo de la reina en 1856 por la especial protección recibida de la Virgen de las Angustias.
- Manto de los “gusanitos” o del Arte de la Seda: negro con bordado en oro y sedas (con todo el proceso de la elaboración de la seda), 1928-1929, donado por el Comisario Regio de la Seda, D. Federico Bernades Alavadra.
Pinturas.
- Sobre la mesa de cabildos: retratos orantes de Felipe II y de D. Juan de Austria, benefactores de la Hermandad en el siglo XVI (el rey cedió los terrenos para construir iglesia y hospital, y su hermanastro fue hermano de la Hermandad), pinturas al óleo del siglo XVIII.
- En un lateral: retratos de los reyes Fernando VI y Bárbara de Braganza orando ante la Virgen de las Angustias, óleo del siglo XVIII. En 1747 Fernando VII se declaró juez privativo de la Hermandad, que desde entonces es Real y adopta como escudo el de los Borbones (el escudo está también en tabla pintada de 1747).
- Resto de pinturas: algunas de temática religiosa (Escala de Jacob, San Miguel) del siglo XVIII, destacando la representación de Jesús con la cruz a cuestas. Otros personajes eclesiásticos que han favorecido a la Hermandad especialmente en el siglo XVIII. Se desconoce la autoría de las pinturas de esta sala.